Goldman Sachs actualiza sus previsiones para 2030, ya que los ingresos mundiales de la música evolucionarán mejor de lo esperado.

En 2017, Goldman Sachs pronosticó que la industria musical generaría 44.000 millones de dólares en 2030. El documento, titulado La música en el aire ha sido ampliamente citado para mostrar el resurgir del sector gracias al streaming tras dos décadas de caídas. Ahora, el grupo de inversión global ha actualizado sus predicciones en un nuevo informe, y son aún más optimistas. Titulado Streaming crescendo; elevando nuestras previsiones del sector, afirma que los ingresos globales de la música alcanzarán los 131.000 millones de dólares en 2030. Más concretamente, para entonces, la música en directo alcanzará los 38.000 millones de dólares, la edición musical 12.500 millones y la grabación global de música 45.000 millones, mil millones más de lo previsto hace dos años.

Este cambio de expectativas se debe a una "adopción del streaming de pago más rápida de lo previsto" y a las "actualizaciones positivas" de grandes entidades como Spotify, Warner Music y Universal Music. Así, en 2030, 1.150 millones de personas en el mundo pagarán por el streaming. Detrás de este repunte está el hecho de que el 68% de los suscriptores de pago procederán de mercados emergentes y que los millennials y la Generación Z están más dispuestos a pagar por la música.

El equipo de Goldman Sachs cree que el mercado seguirá siendo competitivo sin una dinámica en la que el ganador se lo lleve todo. Aunque Spotify y Apple Music prevalecerán como líderes, se prevé que su cuota disminuya con el tiempo. Actualmente disfrutan de un 38% y un 20%, respectivamente, de este mercado pero, para 2030, este statu quo podría bajar al 32% y el 12% del mercado. También señala la empresa china Tencent música ampliará su influencia del 11% actual al 23%.

La previsión de Goldman Sachs es coherente con los últimos resultados de la IFPI, que informó de que los ingresos mundiales por música grabada alcanzaron los 19.000 millones de dólares en 2018, con 255 millones de usuarios de pago. El streaming impulsa una nueva era de crecimiento y se espera que arroje cifras más sorprendentes. Veamos qué ocurre.

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